
01 Ago Campamentos de verano: Los monitores de Global Camp
La palabra monitores se queda corta para definir el papel que realizan los encargados de dar vida a los campamentos de verano. En Global Camp lo sabemos y por eso les tenemos como parte de la familia. Preparan actividades, transmiten valores, enseñan, divierten, organizan, crean, empatizan y muchas cosas más que dan como resultado una maravillosa experiencia a la altura de los acampados. Repasamos la labor de los monitores de Global Camp en los campamentos de verano.
Los monitores de los campamentos de verano
Desde que dicen adiós a su familia y son recibidos por los monitores hasta que vuelven a casa con una sonrisa y la mochila cargada de alegría y buenas experiencias, pasan unos días en los que los niños aprenden mientras se divierten. Unos días mágicos que no tendrían el mismo color si nuestro equipo no estuviera ahí.
Y es que los monitores comparten con los acampados risas, sonrisas, experiencias y alegrías. No, no solo enseñan o diseñan actividades, eso sería demasiado fácil, su implicación va mucho más allá de lo que la palabra ‘monitor’ engloba ¡y eso se nota!
Algunas de las muchas cualidades que tienen los monitores de Global Camp

En Global Camp sabemos que todo nuestro equipo es ante todo educador y por eso valoramos y agradecemos tanto que gracias a su papel se crea un excelente clima de confianza.
- Nuestros monitores están capacitados para crear acciones, tareas y actividades con un fin pedagógico. Pero es que además tienen la maravillosa capacidad de sorprender a los niños tengan la edad que tengan.
- Saben mantener el equilibrio y la estabilidad emocional y también ser coherentes en sus pautas de actuación que sirven de referente.
- Adecuan las normas a las características de cada niño.
- Poseen una asombrosa capacidad de reflexión y escucha. Eso por no hablar de su creatividad, empatía, capacidad de observación y actitud positiva.
- Saben enseñar a tolerar la frustración y a cómo resolver situaciones imprevisibles de una forma pacífica y empática.
- No evalúan a los demás, sino a sí mismos para mejorar como profesionales.
Atienden a las necesidades del propio grupo en general y de cada acampado en particular. Saben cómo ponerse en su lugar sin perder de vista su papel.
Y, cómo no, diseñan como por arte de magia actividades tan divertidas que los acampados siempre se quedan con ganas de repetir.
Los valores que gracias a ellos se promueven
¿Sabes que más saben hacer nuestros monitores? Promover los valores que les ayudarán a crecer como personas, a sacar su mejor versión. Y es que el amor auténtico a nuestros niños nace cada día y se cultiva en los pequeños detalles. Se cuida la relación con ellos siempre desde el respeto, la tolerancia y el diálogo. Los niños también tienen mucho que decir y nosotros estamos encantados de escucharles.
El monitor no es tanto quien enseña, dirige o dispone, sino una persona de confianza que acompaña y propone con paciencia, entusiasmo y el mayor de los cariños. Sin dejar de lado respeto a la identidad de cada niño, a sus ritmos, sus capacidades y nivel de desarrollo.
A la vuelta del campamento los chavales descubren que el respeto nace en uno mismo, que pueden lograr todo lo que se propongan sin dejar de prestar ayuda a los demás. Aprenden que la empatía, la tolerancia y la responsabilidad son el pan de cada día. Se vuelven más autónomos, pero también más solidarios. Descubren que confiar en sus capacidades les hará volar como si tuvieran alas ¡y entonces nosotros nos sentiremos orgullosos! ¡Habremos logrado nuestro objetivo!
En Global Camp llevamos años promoviendo los campamentos de verano como una opción de conciliación de vida familiar y laboral, como un recurso para que los niños tengan unos días de disfrute en la mejor compañía. ¿Quieres saber más? ¡Ponte en contacto con nosotros!
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